El presidente Gustavo Petro y el Ministro de Defensa, Iván Velásquez Gómez, han manifestado su enérgico rechazo por los trágicos sucesos acontecidos el 8 de marzo en la Plaza de Bolívar de Bogotá, durante la marcha conmemorativa del Día Internacional de la Mujer.
La intervención de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (Undmo), anteriormente conocida como Esmad, utilizando gases lacrimógenos y granadas aturdidoras, ha provocado una ola de críticas y descontento entre los participantes de la manifestación, quienes pacíficamente marchaban en defensa de sus derechos.
El presidente Petro ha solicitado una exhaustiva investigación para esclarecer los acontecimientos y determinar las responsabilidades correspondientes. En sus declaraciones, enfatizó que “la movilización social no puede ser objeto de ningún tipo de violencia”, reafirmando su compromiso con el respeto a los derechos humanos y la seguridad de los manifestantes.
Por su parte, el Ministro de Defensa, Iván Velásquez Gómez, ha expresado la determinación del Gobierno de no tolerar el retorno a prácticas violentas por parte de la Undmo, comprometiéndose a tomar medidas concretas para salvaguardar la integridad y la tranquilidad en las movilizaciones sociales.
El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, también ha reconocido la existencia de errores en la actuación policial. Afirmó que la decisión tomada por un miembro de la Unidad está sujeta a una rigurosa investigación y que se compromete a garantizar la manifestación pacífica, así como la protección de los derechos de todos los ciudadanos.
Entre tanto, la ciudadanía considera fundamental que se esclarezcan los acontecimientos y se garantice el derecho fundamental a la protesta pacífica en Colombia.